Acusan a infiltrado en campo de golf de Donald Trump

Ricardo Balderas

MIAMI – Ryan Wesley Routh, de 58 años y oriundo de Hawái, ha sido acusado en una denuncia penal en el Distrito Sur de Florida de delitos relacionados con armas de fuego relacionados con un incidente en el Trump International Golf Club en West Palm Beach el 15 de septiembre.

Routh fue acusado de posesión de un arma de fuego por parte de un delincuente convicto y de posesión y recepción de un arma de fuego con un número de serie borrado e hizo su comparecencia inicial hoy ante el magistrado Ryon M. McCabe en el tribunal federal de West Palm Beach.

Se ha programado una audiencia de detención para el 23 de septiembre. La investigación sigue en curso. Según las acusaciones en la denuncia penal, un agente del Servicio Secreto que caminaba por el perímetro del campo de golf vio lo que parecía ser un rifle que sobresalía de la línea de árboles.

Después de que el agente disparó un arma de servicio en dirección al rifle, un testigo vio a un hombre identificado posteriormente como Routh huyendo del área de la línea de árboles. Posteriormente, los agentes de la Oficina del Sheriff del Condado de Martin, en coordinación con la Oficina del Sheriff del Condado de Palm Beach, detuvieron a Routh.

La denuncia alega que en la zona de la línea de árboles de la que huyó Routh, los agentes encontraron una cámara digital, una mochila, un rifle tipo SKS cargado con una mira telescópica y una bolsa de plástico negra que contenía comida. El número de serie del rifle estaba borrado.

Según la denuncia, Routh fue condenado por delitos graves en Carolina del Norte en diciembre de 2002 y marzo de 2010. El FBI está a cargo de la investigación en curso. La Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos y el Servicio Secreto de los EE. UU. están brindando asistencia.

La Fiscalía de los EE. UU. para el Distrito Sur de Florida y la Sección Antiterrorista de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia están procesando el caso. Una denuncia penal es simplemente una acusación. Todos los acusados se presumen inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad más allá de toda duda razonable en un tribunal de justicia.

Fuente: Departamento de Estado